El progreso y bienestar de una civilización se ve medido por el consumo de energía. En este aspecto, el tema del cambio climático no es un simple debate. Hoy día las empresas energéticas siguen creciendo y ejercen una lucha por el establecimiento de las diferentes opciones que se disponen.

El uso de energías fósiles sigue siendo muy amplio, pero con la llegada de campañas de concientización, eficaces proyectos y el deseo de muchos de salvaguardar el planeta, las energías renovables se han labrado un camino hacia el liderazgo energético. Ahora bien, ¿Cuáles son las diferencias? ¿En qué consisten estas clases de energías? ¿Qué impacto ejercen en el ambiente? Y demás interrogantes, es.Collected.Reviews las trae para ti. Pero primero definámoslas a ambas.

Energías Renovables

Las energías renovables son todas aquellas clases de energías que poseen su fuente ilimitada de la naturaleza. Por ende llegan a ser inagotables y tienen un proceso de regeneración rápida. Además, se caracterizan por no tener un gran impacto en el medio ambiente, ayudando así al planeta a no saber más acerca del efecto invernadero.

Al no contribuir al agravamiento del efecto invernadero, su uso ha cobrado importancia, pero el costo de las mismas es mucho mayor al de las energías no renovables y su eficacia aun no alcanza su máximo de plenitud. Por otra parte para poder usarlas necesitan instalaciones de gran tamaño, por lo que tienen un impacto visual en el ambiente, afectando el paisaje o ecosistema.

Energías Fósiles

La energía o combustible fósil, se obtiene de la biomasa de eras pasadas que se encuentran enterradas y luego del proceso de transformación al cual son sometidos, ya sea aumento de presión o temperatura, producen sustancias con alto contenido energético. Esta clase de energía se considera no renovable, pues tienen una cantidad limitada en la naturaleza y al agotarse no se pueden sustituir como el la energia nuclear que es un caso particular ya que los residuos nucleares que ocasiona solo se pueden almacenar en cementerios nucleares.

Las energías fósiles producen gases nocivos y residuos que afectan al planeta tierra, siendo uno de los principales causantes del calentamiento global. Su uso es amplio aunque son las más contaminantes y abarcan cerca del 80% de la energía mundial. Aun así su fuente de energía está limitada a sólo ciertas zonas del mundo, trayendo como consecuencia que su uso sea sólo a través del comercio, colaboración o guerras internacionales.

Diferencia entre energías fósiles y energías renovables

Las principales características que diferencian a estas dos clases de energía son:

• Fuentes de obtención:

  las energías renovables disponen de una fuente de energía que no se agota con su uso y que se regeneran en un corto plazo, en cambio, las energías fósiles su fuente de obtención es limitada y no puede llegar a ser renovada.

• Reservas:

  las renovables tienen reservas ilimitadas y las fósiles limitadas.

• Capacidad de sostenibilidad:

  en el caso de las fósiles su sostenibilidad es baja a diferencia de las renovables que poseen una capacidad alta.

• Huella ecológica:

  las renovables se caracterizan por su mínimo impacto ecológico y las energías fósiles por el aumento en el daño ecológico.

Tipos de energías renovables

En la naturaleza encontramos infinidades de fuentes de energía inagotables, por tanto hay varios tipos de energías renovables. Entre las más conocidas tenemos la energía solar, y la energía eólica, pero existen otros tipos de energías renovables y baratas como la biomasa, biogás, o energía geotérmica. A continuación suministraremos una lista más detallada:

• Energía solar:

  se obtiene del sol mediante el uso de placas solares que absorben la radiación solar y se transforma en electricidad, después es almacenada o volcada a la red. La radiación solar mediante un sistema adecuado también puede convertirse en energía solar térmica, que consiste en recolectar la energía del sol mediante paneles solares y transformarla en calor. Es decir, que la radiación solar se usa para calentar un fluido hasta generar vapor, y esta acciona una turbina que producirá electricidad.

• Energía eólica:

  con esta energía se puede generar electricidad con la fuerza del viento, usando la energía cinética de las corrientes de aire. Para recolectarla se implementan grandes molinos de viento que se encuentran en los parques eólicos y están conectados a generadores de electricidad.

• Energía hidroeléctrica:

  Producida generalmente en presas, este tipo de energía utiliza la fuerza del agua en curso para obtener la electricidad. Las centrales hidroeléctricas usan la energía de los ríos, ríos que a su vez encienden unas turbinas que mueven un generador eléctrico.

• Biomasa:

  esta energía verde se lleva a cabo a través de la combustión de residuos orgánicos de origen animal y vegetal. La biomasa almacena durante un corto tiempo la energía solar en forma de carbono y esta energía puede llegar a ser transformada en energía térmica, eléctrica o carburantes de origen vegetal. Es una de las energías alternativas más económicas.

• Biogás:

  se produce biodegradando materia orgánica, por medio de microorganismos, con un equipo específico sin oxígeno, que genera gas combustible que luego será implementado para producir electricidad.

• Energía del mar:

  conocida como mareomotriz, la producción de electricidad a través de esta energía se debe al aprovechamiento de la fuerza de las mareas u olas.

• Energía geotérmica:

  su fuente de energía se origina en el núcleo de la tierra. Esta se vale de las altas temperaturas de los yacimientos bajo la superficie terrestre, que se encuentran entre los 100 a 150 grados centígrados, con este calor produce la energía.

Tipos de energías fósiles

Existen tres tipos de energía fósiles hoy en día, pudiéndose utilizar en un estado sólido, líquido y gaseoso. Estas son carbón, petróleo y gas natural, representando las acumulaciones de seres vivos que vivieron hace millones de años y se han fosilizado formando carbono o hidrocarburos.

• Carbón:

  este se formó por medio de restos vegetales, con orígenes distintos dependiendo de la época geológica en la cual ocurrió su gestación. El secreto del carbón para producir energía radica en su capacidad calorífica, la cual es usada para producir el combustible.

• Petróleo:

  está compuesto por carbono e hidrógeno. Siendo un líquido oleoso además, es encontrado en profundidades de 600 a 5000 metros, en grandes masas de plancton marino acumuladas en el fondo del mar. Tiene múltiples aplicaciones no solo es un combustible, representa la materia prima esencial en la industria.

• Gas Natural:

  al igual que el petróleo se encuentran en las grandes masas de plancton marino, compuesto principalmente por metano, siendo incoloro e inodoro, mezclándolo con metilmercaptano para darle ese olor fuerte que permite reconocer una fuga de gas. Se extrae mediante tuberías y se almacena en grandes contenedores de aluminio.

Gas natural en España

El uso de gas natural como fuente de energía en España se remonta a la década de los 60. Específicamente en la ciudad de Barcelona, cuya planta de regasificación comenzó a recibir provisiones de Libia, volviéndola la primera ciudad que implementó en el país este tipo de energía fósil. No obstante su desarrollo por todo el país se postergó a la década de los 80 a partir de la crisis económica y energética, donde las infraestructuras de gas natural en España vieron un gran progreso.

Ahora bien, según los datos del año 2016, España importa hasta el 99% del gas natural, proveniente de diez países diferentes, acreditándole al sistema gasista español un alto poder de suministro. Dividendo esta producción de gas natural en el 58% que entra por el gasoducto y el 42% restante se hace en forma de gas natural licuado (GNL) transportado por los buques.

Estos buques conocidos como metaneros, lo llevan en estado líquido hasta los puertos de las plantas de regasificación españolas, en donde son transformados a su estado original y dirigidos a la red de transporte y distribución. Cabe señalar que España es uno de los principales mercados organizados de gas natural licuado de toda Europa, con un porcentaje del 37% del total almacenado en Europa.

Competencia del mercado de gas natural en España

En otro contexto, el negocio del gas natural en España se ha caracterizado por su inmovilismo pero con el surgimiento de nuevas empresas en el sector, han logrado revolucionar el mercado con nuevas ofertas beneficiando a priori al consumidor y al sector energético.

Entre los principales beneficios tenemos tres factores resaltantes que son: precios competitivos, mayor transparencia y la opción de realizar gestiones de forma online. Estos tres elementos se centran en:

• Gestión online:

  de las principales ventajas que pueden ofrecer las compañías de gas español. Toda empresa debe ir de la mano de los avances tecnológicos y las empresas de gas no han sido la excepción, un proceso de gestión online en contratos y servicios, que le ofrecen comodidad y facilidad al usuario.

• Precios competitivos:

  el aumento de la competencia ha llevado a la necesidad de ofrecer precios y tarifas más accesibles y adaptadas a las necesidades de cada individuo.

• Gestión sencilla:

  los trámites, procesos y las facturas de las compañías de gas ahora son más sencillas y transparentes. Permitiéndole al consumidor una mejor guía de sus gastos y como consecuencia llevando un mejor control de los mismos.

Entre las principales compañías de gas natural de España encontramos a Redexis, Nortegas y Nedgia. Redexis ocupa el segundo lugar en cuanto a más kilómetros de redes de distribución de gas natural en el país, ejerciendo operaciones en diez comunidades autónomas.

Por su parte Nortegas, es la tercera compañía a nivel nacional en la distribución de gas natural a comunidades como País Vasco, Asturias y Cantabria. Nedgia es la compañía líder en el negocio de distribución de gas natural, perteneciente al grupo Naturgy, suministrando energía al 70% de los consumidores y operando en once comunidades autóctonas.

Actualidad del gas natural en España

La situación del gas natural en España se ha visto afectada por la mayor ola de frío en los últimos 50 años. Su precio se ha doblado y posicionado como el más alto en Europa. Alcanzando los 31,82 euros/MWh en contraparte a el precio de Italia que llega a 27 euros y los 25 euros en el Reino Unido. La alta demanda que se ve en estos días, hace suponer que el precio se mantendrá hasta que el frío disipe.

Por otra parte esta situación es un reflejo de lo que está ocurriendo en Asia, quienes sufren otra ola de frío y la buena racha de su economía, lo que les ha llevado a aumentar la demanda a niveles sin precedentes, provocando una fuerte tensión en el mercado. En Japón se temen apagones e instan a la población a racionar el consumo de la electricidad. Esto ha llevado a la búsqueda incansable de la compra de buques metaneros para lograr abastecer la demanda.

Como consecuencia los precios del gas natural de Asia se sitúan en sus niveles máximos y superan los 58 euros/MWh. Otro caso es el de Japan Korea Marker (JKM) cuyo precio se sitúa en los 32,494 dólares, teniendo una subida del 15%, el mayor precio registrado por S&P Global Platts.

En cuanto a China, esta sigue comprando la mayor cantidad de buques de gas natural. De lo anterior expuesto, ahora el mercado gasista español tendrá que competir por los pocos 600 buques metaneros que existen en el mundo, puesto que redujo sus contratos a largo plazo, aunado a esto, España es muy dependiente del gas argelino, quienes se han visto en la obligación de reducir su producción a la mitad.

Conclusión

La era en que vivimos está fundada bajo el concepto de una civilización moderna, que necesita de manera vital para poder seguir llevando el alto nivel de vida actual, un suministro adecuado de energía. España es el país de la Unión Europea que menos ha sabido llevar el desarrollo económico-social, junto al desarrollo de un eficaz sistema energético renovable.

Aunque en el 2019 la economía española emitió 323,2 millones de toneladas de gases de efecto invernadero, 5,7% menos que en el 2018, según la INE (Instituto Nacional de Estadística) el país español necesita desarrollar y fomentar un mayor uso de las energías verdes, asignatura aún pendiente. Y así poder equilibrar el alto consumo de energías fósiles y ofrecer a toda la población española un sistema energético de primera línea.